sábado, 26 de julio de 2014

Ausencias

Ella siempre que follaba iba borracha,
o siempre que iba borracha follaba,
ya no lo sabia...
La cosa era que bebía a diario, y
entre sudores se proclamaba la dueña de los círculos viciosos de viciosos,
todos viscosos con sus sexos mojados y sus corazones rotos.

A mi el mundo me obligó a ver porno desde chiquitita,
camuflado en anuncios
bajo logotipos de grandes marcas
y mujeres esqueléticas jadeando por colonias caras.

A medida que crecí madure
y me metía en páginas de mujeres normales con sus buenas curvas
gimiendo por pobres fontaneros y hombres con oficios de poca monta.

Ella se quería mucho más que todas aquellas remilgadas de bragas atadas,
guardando la virginidad hasta que encontraran al hombre de sus vidas,
entregando lo que no cualquiera podía conseguir.

Pero se equivocan,
ella sabe que cualquier hombre con un sueldo medio
puede alquilarse una vagina por un par de horas.

El día que se enamore regalará lo mas preciado que tiene
aquello que cualquiera no puede conseguir,
su sufrimiento
el dolor de la pérdida.

El día que se enamore se marchará
a sabiendas de saberse amada,
porque el amor no se define entre bragas caídas,
sino en espacios vacíos
y lagrimas saladas,
ausencias.



miércoles, 23 de julio de 2014

Emancipación

Ya somos dos que nos evaporamos.
Qu me voy a algo más mío, a un nuevo blog personal
Que si dibujos y poesía y muchas cosas bonitas.

She is like Red Velvet: http://sheisredvelvet.blogspot.com.es

domingo, 29 de junio de 2014

viernes, 27 de junio de 2014

Entre tanta muerte la poesía lo es único que nos mantiene vivos

He vuelto.

Y como me dijo no hace mucho un amigo, abriendo paso a mi sombra. Encanrandome con el sol, que sin ser el enemigo es hasta el día en lo que más confío, por eso de que saldrá cuando todos se escondan. 

He planeando no tener ningún plan, para que no se me deshagan entre las manos ningún espejo, y aún menos un hasta-luego. Sobre noches que no habitaba en mi ciudad natal, llené de metáforas lo imposible, a falta de imaginación pedía calma a cada desconocido que depositaba en mi mirada una mueca con la distancia de que en la próxima copa cualquier líquido se mezclará mi tristeza, convirtiendo la sonrisa más leal en una esperanza. 

Me tatué dos ojeras llamadas distancia, di a luz ciento tres lágrimas que mojaron mi futuro. Y aquí estoy, viendo el devenir: Tejiendo sueños con taras, para que nunca los vendan. 

Esto es lo que soy y nunca seré, un montón de palabras que viajan bajo el sinsentido del vacío. Aún no sé si estamos luchando o fracasando, ya sabéis que unos buscan el amor de su vida, mientras que otros pocos vivimos la vida para buscar el amor.

Siendo como sea, 
estoy bien
pero con un cigarro estaría mejor.

Así que dame fuego, y ya veremos.

lunes, 23 de junio de 2014

Nos vemos en Roma

Me duele echarte de menos
bueno,
me duele echar de menos tu manera de hacerlo.

Cuando parecía que fueras a acabar de destruirme
me mirabas
débil, con la cara de quien tiene todas las de ganar,
y terminabas de incendiarme.

Y yo, toda Troya
me convertía en la ceniza del cigarro de después
y se me quedaba cara de ruina.

De esas que nadie habita pero que nadie destruye,
de esas que parecen sacadas de un cuento
donde no hay princesas
solo monstruos y quimeras,
y las agujas de las ruecas no son mas que verdes de hierba
a pleno sol en Julio,
capaces de dormirte para siempre
y hacerte perder un día de playa.

Echaré de menos tu forma de hacerme gritar para dentro,
de mirarme como si fueras el dueño del tiempo,
de las prisas que tenían los orgasmos por salir a verte,
del dolor de quien quiere más pero ya ha tenido suficiente.

Echaré de menos esa sensación en los lugares públicos pero desiertos,
la manía de que nos diera igual,
echaré de menos la seguridad de saberte ahí
escondido entre las embestidas,
el yang en el que te convertías después de bajarte los pantalones
la poca humanidad con la que me tratabas.


Me dijiste que no me enamorase de ti, y no lo hice,
pero me enamoré de tu forma de destruirme
con las ansias de quien quiere poco y odia mucho
y tiene todo el tiempo de su parte.

Siempre he sido más de no leer entre líneas
de equivocarme, agachar la cabeza y esperar que nadie se diera cuenta
del error,
de las ganas de volverlo a cometer,
de que fui yo la que lo encontró porque fui yo la que lo busqué.

Echaré de menos tu forma de hacérmelo.
Me paro a respirar a medio camino, tu sigue.

Nos vemos en Roma.


domingo, 15 de junio de 2014

Follar también es un verbo.

Si esperas al amor con la puerta abierta de par en par
puede entrar un impostor.
Alguien que te haga creer que el amor es un sustantivo abstracto que dura para siempre,
pero no
porque nunca ha habido palabra más concreta que esa.

El amor tiene nombre propio.

Pero si cierras la puerta
y te declaras firme e indeleble,
no tiene porque entrar,
puede morirse de hambre en tu felpudo
hasta deshacerse,
mátalo metiendo la supervivencia por la ventana.

Porque de amor no se vive,
pero de sexo sí.

Y follar también es un verbo
igual de simple en activo que en pasivo.

No como amar
en el que los aspectos no son complementarios.

Pues no es lo mismo amar
que ser amado.

Decidme si follar no es un infinitivo simple precioso.


domingo, 25 de mayo de 2014

Crash





'No todas las ojeras están hechas de madrugadas' 
el otro día se lo decía a Miriam, mientras hablábamos sobre poesía y estados anímicos que sufren mucha anemia. 

Siempre he pensado que escribir es abrirte en canal, sacar todo hacia afuera, hacer una autopsia a tus sentimientos. Y antes de ayer recordé que se me ha olvidado escribir, que hace mucho que no lo hago, que esto que leéis es solo un conjunto de letras con un poquito de coherencia porque lo que es cohesión, está falto. 

Lo más noble que puedo decir es que sé que algún día volveré, sé que volveréis a tacharme de poeta sin serlo, pero sin dejar de ser; me aplaudiréis felicitandome por un rima que no es leyenda pero tiene mucho de Bécquer; y sonreiréis y me haréis más feliz por cada abrazo que en la vida real es el "me gusta" más sincero que conozco.

Ahora todo se ha llenado de madrugadas y amaneceres, ha vuelto el miedo con su careta de barro. Y se me ha deshecho en la cara. Mi baile nupcial con palabras que no acaban, sino bostezos en metros a las ocho de la mañana. Ante minutos de espera de una canción en replay, es decir interminable, cerca de personas que únicamente me ofrecen una satisfacción exterior finjida. 

no sé como caminar, no sé qué hacer, no sé, odio no saber. 

pero la autodestrucción como método de avance está de putisima madre.

volveré lo prometo.