miércoles, 27 de marzo de 2013

Buenas noches Rose

Mientras la ciudad duerme yo hago pactos con la Luna.

Me promete que la cuidará bien, y yo, la insisto que no se la lleve, que todo podría ser más feo si ella no está. Pero claro, es un verdadero ángel, y la luna se escuda diciendo que las alas las tiene para volar, para viajar. Yo la ofrezco todas mis horas de sueño para que ella sea eterna, por las noches en vez de dormir te miraré, pero no te lleves a mi ángel, es toda la mi vida. La luna me explica que viviré el resto de mi vida en una  tristeza continua, que nadie podrá mirarme la retina porque estará tan tiesa como una espina, que me volveré cínica, versátil o incapaz de sentir por si sola. Sonriendola la grito: "Todo riesgo sería de locos no aceptar" y ella esfumándose me susurra: "La locura te matará".

Buenas noches, descansa mi vida, yo estoy luchando por ti, para que no te lleven alejada de mí.

lunes, 25 de marzo de 2013

Lencería fina para noches duras



''Nos reconocimos al recordarnos, o tal vez al revés,
nos emborrachamos y dejamos que la piel hablara su propio idioma

y nos contamos tantas cosas

y nos hicimos tantas otras que por la mañana
la humedad en el colchón era un mapa
con la palabra AHORA
como única ley de nuestro nuevo mundo.

Sudabas.
Y estabas preciosa.

Así que te lo volví a comer 
a modo de desayuno.''



Me he comprado un conjunto de lencería fina para noches duras, para seducir al tiempo que se nos quiso escapar, para poner duras las manillas del reloj y apagar a nostalgias el sol. Voy a dibujar el mapa que me ayude a perderme en tu espalda, y voy a arañarlo con ganas.
He decidido hacerme inmortal en tu entrepierna, voy a dejar que hable mi piel y voy a darte mi mejor y más largo discurso, y me vas a escuchar hasta el final, hasta que decidas que no puedo más, cuando me tiemblen las piernas y tus ansias de mi vayan mas rápido que los latidos de tu corazón. Voy a contarle las cosas más ciertas, incoherentes y blasfémicas a tus hombros, voy a meterte mano, espalda, pecho y corazón.
 Voy a dejar que desayunes, comas, meriendes, y cenes en la cama, pero no pienso pasar por la cocina, esto es un torneo de dos, y gana el que más se alimente, voy a ser insaciable, como el tiempo que le he quitado al reloj, que me pasará factura, probablemente más cara de lo que te costaría la mejor puta de lujo, pero aunque ella sepa hacer maravillas yo soy mejor, hago milagros, te voy a llevar al noveno cielo, pero no prometo traerte de vuelta. Después probablemente iremos al infierno, allí podremos jugar el mismo torneo cada día, así que en el fondo ya he ganado.


''-Puedo convertirme en una gran grupi seguidora de vuestro grupo ¿sabes?
-Bueno, si es lo que quieres...las grupis cumplen muchas funciones cariño, no sé si podrás llevarlas todas a cabo.
-Ponme a prueba.
-Vale, si te pido algo tienes que hacerlo, ¿hecho?, cualquier cosa
-¿Cualquier cosa? Trato hecho.
-Vale, te vas a quitar las bragas y vas a volver al salón con tus invitados como si no pasara nada
-No puedo hacer eso...
-Ya sabía que no serías una buena grupi, eres... demasiado ética.
-Creo que te equivocas...Verás si no me quito las bragas, es porque no me las he puesto.''

Comienza el torneo.

Alguien a quien odiar los domingos por la tarde

Necesito perderte, para siempre, necesito saber que no estarás nunca más, que por mucho que llore no vas a volver, que por mucho sexo que te pida no me lo vas a dar, que no vas a iluminar mis noches, que no me irás a buscar si no encuentro el camino. Necesito estar segura de que voy a perderte, porque solo así puedo perderme yo, no quiero recordar ni mi nombre, ni el tuyo, ni la manera que tenías de perderte entre mis muslos, quiero no tener donde esconderme, necesito saber que se siente siendo realmente libre, libre para quemar mis gritos al alba, para pintarme las uñas de nada, para estar expuesta a todo, sin una manta con la que taparme, ni una sábana a la que agarrarme antes de desaparecer en un orgasmo. Voy a traficar con tus sueños y a dejarte sin razones por las que tocarme, voy a convertir mis gemidos en argumentos y a debatirme con tu espalda en una lucha a muerte, y voy a perder, porque tu vas a perderme, no serás bien recibido nunca más detrás de mis sonrisas. Has sido un cabrón haciéndome feliz sin marcharte a tiempo. Le daré tu último beso al que sea capaz de hacerme daño, y será mejor que el primero que te ganaste. Ya sé que no puedes vivir sin mí, y soy difícil de olvidar, pero te jodes. Te vas a joder a intentarlo, vas a dejarte la piel en no volver. Porque necesito tener alguien a quien odiar los domingos por la tarde.

domingo, 24 de marzo de 2013

Amelie

"Sin ti las emociones de hoy 
no serían más que la piel
 muerta de las de ayer."

Mi uve con muletas:
Un día creí perderte por aquellas hileras de sonrisas, pensaba que el cambio era algo irremediable, pero era necesario. Nos quemamos igual que el viejo Windsor, llama a llama, ceniza a ceniza y así pronto acabamos por apagarnos, pero todo lo que se apaga se vuelve a encender, y nosotras a exceso de estar encendidas brillamos, como estrellas de la noche, como estrellas de Madrid que entre la contaminación se camuflan. Cuando brillamos damos sombra a los gigantes y dejamos de preocuparnos por nuestra sombra, es mucho más minúscula. Y he conocido y conoceré más sonrisas, pero creo que jamás podrán suplantar la tuya, aunque esté apagada, desenchufada, porque al igual que el verbo ser no dejará de existir, nosotras fuimos y seremos y perduraremos entre el lenguaje fotografico.
Y ya sabes lo que dicen: Si lo bueno breve, dos veces bueno... imagínate si en vez de ser breve es eterno.


Tenemos una lista que tachar, tenemos a unos pseudohermanos que imitar, nos tenemos hasta la saciedad.

viernes, 22 de marzo de 2013

Remember when the boys we're all electric?

A veces llega el punto en el que todo choca, en el que todo colapsa. Ese punto en el que, sin saber cómo ni por qué, dos cosas que estaban separadas a una distancia x se juntan a una velocidad v. Y chocan. Y colapsan. Y ese todo, esas dos cosas separadas por esa distancia que chocaron a esa velocidad, se llena de vueltas y rodeos hasta que una micronésima parte de ese punto consigue escapar por una rendija de la mente. Recuerdos. Muchos recuerdos. 
Pero, ¿qué pensar sino que recuerdos? Futuro. No sabemos nada de él. Y sólo nos queda eso. Recuerdos.
Recuerdos de lo sucedido. Recuerdos de lo que pudo suceder. Y recuerdos de lo que no sucedió. No hay peor migraña que los recuerdos.

Placeres menguantes

Yo soy un búho.Un búho pequeño y ambicioso. Un búho que por las noches escribe; a veces desnudo versos que no tienen sentido completo, pero los perfecciono hasta convertirlos en mi prototipo, adivinad que tipo de versos: flacos y altos. Me alimento de ellos, aunque últimamente no los encuentro, siempre están demasiado ocupados complaciendo algún poema. Soy un búho raro, algo despistado que busca su sitio entre los árboles, pero nunca me dan el cariño que necesito, y me largo. Por las mañanas duermo, pero jamás lo suficiente porque pienso en como la vida es nuestro propio sueño. Y los demás búhos me dicen que soy un búho carismastico, tengo un plumaje diferente al resto, y siempre bebo café.
Tú, eres la luna, la que siempre observa la noche desde las grandes alturas, tú eres blanca, a veces amarilla, pero siempre tan bonita.

Por las noches, aunque me pesan los parpados la miro, la grabo en mi retina...porque cuando sale el sol se esfuman tanto su imagen como mi corazón, y no puedo dormir de tanta felicidad.

martes, 19 de marzo de 2013

Sonido dulce sonido

Todos sabemos volar, pero no todas las alas tienen la misma velocidad. Unos son tan rápidos que no disfrutan y acaban siendo rutina, dejan la magia de levitar por una aburrida complejidad. Otros disfrutan cada centímetro de aire comprimido, creyendo que el cualquier momento caerán y se perderán entre la realidad. Lo que nos une a ambos es que siempre acabamos caídos en el asfalto, como los ángeles del retiro, ignoramos el absolutismo del tiempo, etiquetándolo como relativo, pero es una verdad matada a tiros.

Somos sacos de nervios, 
somos bolsas de ansiedad,
somos materia implícita,
de la que nadie se atreve a indagar.

Poesía somos
y en poesía nos convertiremos,
a través de números creceremos,
con letras nos escribirán.
Somos la vida de una absurda molecula
tan pequeña como cruel,
porque un día deja de ser y nos mata vivos.

Aprended a reír,
Aprended a llorar,
aprended a amar, pero lo suficiente,
que siempre duele.
Y el dolor es agradable
pero siempre y cuando sea blando.

Mañana,
hoy
ayer.

Unos muriendo por vivir y otros viviendo para morir.

lunes, 18 de marzo de 2013

Tan raros somo humanos

Tenías esa maldita manía de mantenerme algo más cerca de la realidad que a diferencia de los demás era una forma fructífera de conocer el mundo allí fuera, algo ilimitado como una sala de espejos donde reaparece nuestro reflejo, nunca te fíes de esa sonrisa, porque no es la mía.

La resistencia siempre fue buena para sobrevivir, que no vivir, porque me enseñaste que la vida era más compleja de lo que parecía, pero con adicciones las lagrimas son menos sólidas. Puras drogas, duras como nuestras armaduras; y eso es lo que eramos, una gran fortaleza, que aunque ahora no somos más que piedras, un día estuvimos arriba, un día fuimos fuertes. Y callamos tanto que abusamos del silencio y nos dio un gran vértigo que nuestros gritos comenzaron a ser eternos. Ahora cuando en silencio nos escucho hablando, temblando y pensándonos. Tú nunca miraste hacía abajo porque creías que los gigantes se caían, y ya tenías bastante con ser frágil para romperte, por eso solía buscarte desde abajo. Pensándolo bien, no fue culpa tuya, creo que nunca me llegaste a ver, sabías que existía porque me hacía notar, pero nunca me visualizaste, y reprochartelo sería bastante cruel, porque yo al fin he aprendido a mojarme en esta tormenta sin ti, ingenua de mí, que creía que las gotas me dolerían por ser la sucesión de mis alas. Creí en ti, creí en mí, ahora creo que el futuro es tan negro como la prolongación de tus pupilas, esas que a ojos de la insomne abrías.

jueves, 7 de marzo de 2013

Lo nunca visto a ojos de los espejos


En realidad las cosas
verdaderamente difíciles 
son todo lo que la gente 
cree poder hacer
a cada momento.
J. Cortázarr
Así es la mediocridad de un nuevo día: 

Te levantas con la seguridad de que te vas a comer el mundo, 
y al acabar tienes la totalidad de que él ha sido quien te ha engullido,
sin remordimiento alguno, como aquellos monstruos de los que tanto
huimos que como afición severa tienden a hacernos un nudo en los zapatos
para caer sin remediarlo. Pero esta es nuestra vida, una rutina perversa
y espesa, los acontecimientos sucedáneos que nos confirman que vivimos
para y por algo, aunque nos memoricen felizmente su invisibilidad. 

Por eso aquí los lastres son como el amor, creemos poder desprendernos de
ellos al igual que de una colilla sin nicotina, pero están agarrados a nosotros para
formarnos ante la transparencia de una sombra, esa que vive arrastrada y bajo 
la dictadura de un sol que la mata ante los síntomas de una sobre dosis de calor...
y bendita la belleza de esa amarilla luna que siempre permite dejarla explícita bajo
la admiración de las estrellas que una a una va reflejándose en su transparencia.

No está todo perdido cuando continuas enfrentando a la reina en esa absurda
partida de ajedrez, el jaque-maté de un pseudo caballero que derribará todo lo 
que haya por delante

Y buscais lo fácil, me lereis pensando en "¿de qué cojones hablará?"
no le deis importancia a la universalidad, nuestras palabras son más resistentes
que cualquier arma, rutina, y día jodido.


Asomaros al acantilado de mis palabras, caed y disfrutad de la caída, 
que mi mediocre 'poesía' os haga saber que escondo más de lo que 
pretenderé enseñar, porque toda la verdad se puede explicar con mentiras.
Y esa es nuestra vida, mentiras de un rutinario hipócrita día.




martes, 5 de marzo de 2013

Autorretrato poético

Yo nunca creí en el alma,
pero ahora empiezo a creer.
Noto mi cuerpo vacío
porque no la volveré a ver.
Nunca la vi de hecho,
pero ahora que empiezo a creer
siento su rastro muy dentro
en lo más profundo de mi ser.
Pero un rastro sólo es eso:
algo que no se volverá a ver.
Y al no sentirla conmigo,
al no sentirla en mi piel,
se llenó de cicatrices
dejando su rastro en mi ser.
Yo nunca creí en el alma
y ahora que empiezo a creer
ella ya se ha ido
ya abandonó mi ser.
Las lágrimas se tornan vacías,
nunca diré que la encontré
porque mi alma se ha marchado
y no la volveré a ver.
Lo peor de todo es que sospecho
que no la volveré a ver
porque mi alma se ha marchado
se marchó para no volver.
Y es que sé, que más que marchado,
y más que abandonado,
mi alma se ha ido
por no saberla entender.
Y al no entenderla, ahora comprendo
que mi alma no se fue.
Que mi alma se ha roto,
se ha fundido
y se desintegró en mi ser.